La antigua ciudad romana de los "Igaeditani" contribuyó junto con otros municipios de la Lusitania al levantamiento del puente de Alcántara. Su territorio es rico en minas de oro, destacando los placeres auríferos del río Erjas en Monfortinho.
Idanha a Velha conserva todavía una completa muralla de sillares graníticos, templos, basílica paleocristiana, prensa de aceite, puente romano- medieval y numerosas inscripciones latinas. Pero el edificio más representativo es la llamada Catedral, una maciza iglesia de origen prerrománico. Se trata probablemente de un templo visigótico construido sobre uno suevo, acerca del que existen numerosas conjeturas por lo singular de su factura. Conserva un baptisterio visigótico y se cree también que se convirtió en mezquita, debido a la profusión de arcos polilobulados.
El obispado de Egitania (Idanha-a-Velha) perteneció al arzobispado de Augusta Emerita (Mérida). Entre ambas ciudades se extendía una calzada romana cuyas obras más monumentales son los magníficos puentes de Alcántara (río Tajo) y el de Segura (río Erjas). La ciudad antigua de Idanha ha sido declarada por el gobierno portugués: “Aldea Histórica de Portugal”, testigo singular de la historia y de la cultura portuguesas.
En sus proximidades se encuentran el Castillo de Monsanto y su bella “Aldea Histórica”, así como las Termas de Monfortinho que gozan de un microclima privilegiado. Lo mismo que Idanha, Monsanto es un asentamiento muy antiguo que, tras ser conquistado a los árabes, fue entregado a la orden de los templarios, a quien se debe lo que queda del castillo. Junto a él aparecen los vestigios de la iglesia de San Miguel, con bella portada románica y tumbas antropomórficas cavadas en las rocas graníticas.
Idanha a Velha conserva todavía una completa muralla de sillares graníticos, templos, basílica paleocristiana, prensa de aceite, puente romano- medieval y numerosas inscripciones latinas. Pero el edificio más representativo es la llamada Catedral, una maciza iglesia de origen prerrománico. Se trata probablemente de un templo visigótico construido sobre uno suevo, acerca del que existen numerosas conjeturas por lo singular de su factura. Conserva un baptisterio visigótico y se cree también que se convirtió en mezquita, debido a la profusión de arcos polilobulados.
El obispado de Egitania (Idanha-a-Velha) perteneció al arzobispado de Augusta Emerita (Mérida). Entre ambas ciudades se extendía una calzada romana cuyas obras más monumentales son los magníficos puentes de Alcántara (río Tajo) y el de Segura (río Erjas). La ciudad antigua de Idanha ha sido declarada por el gobierno portugués: “Aldea Histórica de Portugal”, testigo singular de la historia y de la cultura portuguesas.
En sus proximidades se encuentran el Castillo de Monsanto y su bella “Aldea Histórica”, así como las Termas de Monfortinho que gozan de un microclima privilegiado. Lo mismo que Idanha, Monsanto es un asentamiento muy antiguo que, tras ser conquistado a los árabes, fue entregado a la orden de los templarios, a quien se debe lo que queda del castillo. Junto a él aparecen los vestigios de la iglesia de San Miguel, con bella portada románica y tumbas antropomórficas cavadas en las rocas graníticas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario