martes, 26 de enero de 2021

Vía Javier-Yesa-Liédena - Navarra


Otra vía saldría de Javier, posiblemente por el mismo sitio donde transcurre la Cañada Real o de «los Roncaleses», paralela por encima y a pocos metros de la carretera actual a Yesa, para después pasar el Aragón por el también llamado puente de «Los Roncaleses» al lado de la piscifactoría. Hoy está en ruinas; el primer arco en la orilla de Yesa asentado sobre la roca madre y fuera del agua sobre unos peñascos naturales unida su base con bloques de sillería y argamasa, apreciándose abundante cal, tiene siete arcos, tajamar de unos 4 m, 1,5 m adheridos, anchura del firme o paso del puente 2,15 m, altura del pretil 1 m y anchura 40 cm. 

En el firme crecen toda clase de ramajes, incluso un pino de 2,5 m de altura Hay oquedades en la parte baja del pretil para desalojar el agua de lluvia, una piedra del pilar tiene una fecha pintada en negro 1891.

A 30 m a la salida del puente en la orilla de Yesa hay 12 m de empedrado, con las orillas cubiertas por la vegetación.

Este puente al parecer fue de origen romano, el empedrado de la salida así parece confirmarlo, también los montañeros me dicen que la Cañada Real que atraviesa el monte de Leyre tiene vestigios de calzada romana y era continuación de la salida del puente, los Anales de Navarra hablan de él como existente ya en el año 785 y en aquella época de guerras continuas contra francos y visigodos en el siglo V, y en el VIII contra los musulmanes, no era tiempo apropiado de grandes obras, por lo que debía estar construido antes de estas invasiones.

Nuevo Miliario 

Castris Caecilis Cáceres


Castris Caeciliis: Tengo al respecto mi propia opinión. Hay que situarlo en Cáceres, pero en lo que se llama barrio de San Blas (Seminario, Facultad de Filosofía y Letras, Cárcel); es decir al norte, en el camino o carretera que va a Cáceres el Viejo, que bien pudiera ser la Castra Servilia. 

La zona ha dado fragmentos de mosaico, basas, columnas, epigrafes, un anillo de oro con piedra preciosa, etc. Pero lo más revelador, a mi juicio: fui testigo al hacerse el campo de fútbol del Seminario en 1955-56 de la aparición de una serie de cimientos de barracones perfectamente alineados (conté una decena). Estos edificios rectangulares tenían un zócalo de mampostería como de medio metro. Cada barracón era independiente de los que tenía alrededor, de tal modo que entre ellos formaban calles. Entre los escombros recogí rombos de piedra que formaban el pavimento de los barracones, semejantes a los encontrados por Schulten en Cáceres el Viejo. (De paso, mi agradecimiento por haber divulgado los datos de Schulten, tan valiosos; por cierto, a mí me llama la atención la total ausencia de monedas acuñadas en Mérida).

(Sin embargo, veo que los datos de Schulten no han llevado a su ánimo la sospecha de que en el supuesto campamento (tres veces más extenso que el Cáceres amurallado, con ricos y abundantes vestigios de vida civil y casí nulos de vida militar) hay gato encerrado. )

Miliario extravagante 

domingo, 24 de enero de 2021

Mausoleo El Torrejón - Toledo


Es un yacimiento arqueológico que está compuesto por una buena muestra de tumbas que forman una necrópolis de tipo romano bajo imperial y tardía.

Destaca la existencia parcialmente conservada de una estructura de forma cuadrangular, que se corresponde con un Mausoleo (panteón de enterramiento parental).

Esta fabricado con “opus caementicium” con al menos dos metros de altura conservados, y que contiene un espacio subterráneo (cripta) casi colmatado, existiendo restos exteriores de recubrición de granito y cuarzo.

Asimismo destacan en la necrópolis la existencia de otro tipo de tumbas construidas en lajas de granito bien talladas que completan el espacio necrolátrico.

Cultura CLM

jueves, 21 de enero de 2021

Miliario de Caracalla


También in situ fué localizado el de Caracalla (número 237), en el que la ascendencia familiar precede al nombre del emperador, siguiendo a continuación de éste todos los títulos. 

No es este el único de Caracalla existente en Portela, sino que le acompañan otros cuatro que naturalmente debieron corresponder a puntos diferentes

Vías Romanas de Galicia 

Miliario de Trajano - Pórtela do Homen


El nombre de Trajano estuvo en un miliario que nos han transmitido HÜBNER y VAZQUEZ NUÑEZ (número 236 y, según indicaciones posteriores, parece se ha borrado con el transcurso del tiempo. Creen estos autores que fué de Adriano, pero la mutilación que ha sufrido no permite afirmarlo. 

Es posible efectivamente que sea de Adriano y que este segundo nombre sea una de las palabras desaparecidas, pero de igual manera también existe la posibilidad de que no haya estado nunca esculpido en esta columna, y en este segundo caso el miliario pertenecería a Trajano. Su distancia es de XXXIV millas y corresponde al lugar donde se le encontró. 

Vías Romanas de Galicia 

Miliario de Nerva - Portela do Homem


Nerva está representado en este punto por una columna (número 235), que no se puede afirmar si está donde realmente le corresponde o ha sido trasladada, ya que el número de millas está incompleto, conservando sólo XXXI 

El nombre del emperador falta por estar mutilado, pero la comparación con otros del mismo revela que pertenece efectivamente a Nerva. Está en nominativo y corresponde al tercer consulado, pudiendo fecharse, por tanto, en el 97 y es el que hemos puesto como ejemplo del cambio de redacción al pertenecer dentro de la misma calzada a conventos diferentes. (Cf. p. 9.) 

Vías Romanas de Galicia 

martes, 19 de enero de 2021

Villa romana de Burguera - Salou


La Villa Romana de la Burguera fue una gran villa de explotación agropecuaria romana que se halla en la entrada del núcleo urbano de Salou, desde la carretera de Vila-seca.

Actualmente los restos que no se rescataron en las excavaciones, se encuentran bajo el hotel "villa romana" pero aun se pueden ver varios restos de la época romana, en el jardín del hotel.

Las excavaciones en este núcleo de Salou se llevaron a cabo entre los años 2000 y 2002 en cinco fases. Esta villa romana tiene características similares a otras documentadas en el área del campo de Tarragona.

Las mas antiguas corresponden a un granero de piedra datado del siglo I aC, pero debido a una reforma llevada en el siglo I dC transformaron el asentamiento inicial en una villa de tipología romana dedicada principalmente a la producción de vino. A partir de la segunda mitad del siglo II, hacia los inicios del siglo III, la ciudad se transformó en una villa de carácter lúdico con la ampliación de la zona de hábitat y construcción de un conjunto termal.

Los silos se halla en la entrada del núcleo urbano de Salou, desde la carretera de Vila-seca.

Actualmente los restos que no se rescataron en las excavaciones, se encuentran bajo el hotel "villa romana" pero aun se pueden ver varios restos de la época romana, en el jardín del hotel.

Las excavaciones en este núcleo de Salou se llevaron a cabo entre los años 2000 y 2002 en cinco fases. Esta villa romana tiene características similares a otras documentadas en el área del campo de Tarragona.

A partir de la segunda mitad del siglo II, hacia los inicios del siglo III, la ciudad se transformó en una villa de carácter lúdico con la ampliación de la zona de hábitat y construcción de un conjunto termal.


Mausoleo de las Vegas de san Antonio


Se encuentra a las afueras de las Vegas de San Antonio (a 15 km al este de Talavera de la Reina y 7 km al noroeste de La Pueblanueva, Toledo). El lugar se halla concretamente a 1,2 km al oeste de Las Vegas de San Antonio, encontrándose a 1 km de distancia del curso del Tajo, cercano a las labranzas de El Álamo y Santa María y del Cerro de Santa María, donde se sitúan yacimientos de hábitat Antiguo y de la Antigüedad Tardía asociados al Mausoleo.

Se cuenta con noticias de la aparición de éste desde 1871 por un informe del erudito Jiménez de la Llave a la Real Academia de la Historia, habiendo sido documentada y excavada la cripta subterránea a mediados de la década de los años sesenta del siglo XX por miembros del Instituto Arqueológico Alemán de Madrid.

El Mausoleo representa un gran edificio monumental hispanorromano de época tardía en forma de panteón de enterramiento colectivo parental, tipológicamente encuadrable en la serie de grandes edificios sepulcrales de planta centralizada, excepcional para el ámbito del occidente del imperio, y que continúa como espacio de culto durante la etapa visigoda, durante la cual es espacio también es utilizado como necrópolis. Parece ser que el espacio es expoliado y reutilizado durante la etapa Islámica.

La estructura inmueble representa un edificio de planta octogonal del cual quedan aún las cimentaciones de dos líneas concéntricas, los entalles de entrada, vanos y apoyos, así como una cripta en forma de segmento de octógono en la mitad central.

La fábrica de la construcción está compuesta por "opus caementicium", mientras que la cripta está construida con sillares tallados de granito, y su bóveda era de ladrillos con enlucido interior de estuco, completándose suelos con "opus signinum".

Como evidencias muebles arqueológicas cabe destacar además de cerámicas finas (terras sigillatas claras) y comunes, tanto de la Antigüedad tardía como altomedievales (islámicas), la existencia de al menos tres sarcófagos, de los cuales al menos el historiado realizado en mármol y denominado «Sarcófago de los Apóstoles» (encuadrado en época del emperador Teodosio) se encuentra actualmente expuesto en el Museo Arqueológico Nacional, mientras que los otros dos de granito se encuentran en paradero desaparecido.

Urbe Regia

sábado, 16 de enero de 2021

Villa de Torres del Río - Navarra


La Villa de Torres del Río se encuentra situada a mitad de camino entre las localidades de Los Arcos y Viana, al borde de la antigua ruta de peregrinación a Santiago, dominando un alto junto a la colina de Sansol, en un paraje pintoresco. 

Esta localidad existía ya antes de la invasión musulmana. En su área se hallaron restos romanos de una explotación agrícola, así como cerámicas y alguna piedra labrada (encontrada a alrededor de 1 km del pueblo en dirección a Logroño). Todo ello hace pensar que fue un asentamiento ya durante la época romana.

Wikipedia 

Las Cávenes - Salamanca


En Las Cávenes se puede apreciar la huella de la explotación aurífera romana.

Las Cavenes son desmontes mineros producidos por la explotación del oro en época romana. Forman un paisaje característico en el que se pueden apreciar las huellas dejadas en el terreno por los procesos de extracción, transporte, lavado y acumulación de estériles entre la primera mitad del s. | d.C., y finales del s. Il d.C., conservándose de forma excepcional por la fosilización del paisaje.

La conquista romana de la Península- Capítulo 7 y último


La obra de César 

Es tradicional considerar las fases del asentamiento romano en la Península en dos periodos diferenciados: el anterior y el posterior a César, porque su política en Hispania marca un profundo avance en la incorporación de la Península a la romanización. Sus medidas tuvieron como fin más inmediato el total sometimiento de la provincia Ulterior, con una serie de disposiciones favorables para quienes fueron leales, con la consiguiente represión y castigo a sus enemigos vencidos. Concesiones de ciudadanía, fundaciones coloniales, reformas y repartos agrarios, medidas fiscales y administrativas contribuyeron a conseguir cambios sustanciales y al desarrollo de la organización municipal. 

Concedió asignaciones de tierras a sus veteranos y a elementos procedentes del proletariado romano urbano, permanente foco de conflictos en Roma. El  resultado fueron unos asentamientos, donde romano-itálicos se mezclaron con las promociones de gentes autóctonas. Con ello no sólo se lograba crear una considerable infraestructura administrativa y urbana, necesaria para su organización y control, sino que contribuía a expandir entre los indígenas la cultura y los modos de vida romanos, sin olvidar que, a la vez, creaba para sí las relaciones cliente-patrono que aseguraban su poder político en la Península . 

Algunos de los centros son colonias de nueva creación:  Scallabis (Santarem),  Hispalis, (Sevilla),  Urso (Osuna),  Hasta Regia (en Jerez de la Frontera),  Ucubi (Espejo),  Itucci (En Baena). 

La colonización, en su estricto sentido no alcanzó su importancia y extensión hasta que César sentó las bases para su desarrollo en el Imperio. Otros núcleos urbanos adquirieron el rango de colonia como Metellinum, fundada por Cecilio Metello,  Carthago Nova,  Tarraco y Celsa (Velilla del Ebro). Se  trataba de donación de tierras, ventajas fiscales y sobre todo, jurídicas, como las ciudadanías latina y romana. 

Si  no por su originalidad, la obra de César supera la de sus antecesores por su mayor apertura y,  sobre todo, por la genialidad de su visión política. Es muy posible que Julio César utilizara los modelos ya iniciados por Pompeyo, e incluso anteriormente por Sertorio, en su política de capta ción del elemento indígena para su causa, ofreciendo a cambio unos beneficios para cuyo disfrute exigía necesariamente la adaptación e integración en el “mundo romano”. Su  obra podía definirse como uno de los pasos más decisivos hacia la consolidación del asentamiento social y administrativo romano.

Pilar Fernández Uriel 

miércoles, 13 de enero de 2021

Miliario de Tito - Portela do Homen


También fué hallado en Portela do un fragmento perteneciente a los mismos (número 234), que conserva sólo las cuatro últimas líneas. Están éstas muy incompletas, pero a vista del anterior y de otros semejantes, se puede restituir el nombre del legado y afirmar que estuvo dedicado a Tito, aunque Hübner lo da como dudoso. 

De las millas no tenemos el número completo, pero lo conservado, XVI, indica con seguridad que no son las treinta y cuatro exigidas para que estuviese in situ. Hay que admitir, pues, que tuvo que corresponder a otro lugar distinto de Portela.

Vías Romanas de Galicia 

Miliario de Tito y Domiciano - Portela do Homen


Portela do Homen es la localidad donde los miliarios han aparecido en mayor número, y son dieciséis las columnas en ella localizadas. El más antiguo es de Tito y Domiciano (número 233) y corresponde al año 80. 

Está in situ, ya que la distancia a Braga desde este punto es de unos cuarenta y cinco kilómetros, equivalentes a las XXXIV millas que la columna señala. 

Por él y otros del mismo emperador sabemos que la vía que nos ocupa se abrió imperando Tito, y estaba terminada en el año en que el miliario fué colocado. Su penúltima línea nos da prueba de ello:"Via nova a Brac". El nombre de Domiciano aparece borrado debido a la damnatio memoriae de que este emperador fué objeto, y se menciona al legado C. Calpetano Rantio, como encargado de la obra. 

Vías Romanas de Galicia 

martes, 12 de enero de 2021

La conquista Romana de la Península - Capítulo 6


La guerra civil en Hispania entre César y Pompeyo (49-44 a. C.)
A partir de la segunda mitad del siglo I a. C., los acontecimientos que se suceden en la península fueron ya un fiel reflejo de las tensiones y eventos de la política romana. La Península estaba preparada para jugar su papel en este periodo histórico. Son nuestras principales fuentes Apiano, Plutarco, Dion Casio y Livio. 

Pompeyo supo aprovechar su éxito en la guerra sertoriana. No  sólo sometió a los rebeldes a Roma, sino que consiguió reforzar en la península el poder personal, político y militar que ya había alcanzado en Sicilia, África, y Galia.  Tal vez, Pompeyo aprendió la lección de Sertorio y utilizó la fidelidad de los indígenas hispanos. Concedió la ciudadanía romana a personas influyentes de su nobleza, atrayéndoles a su causa, como la poderosa familia de los Balbos en  Gades. Las concesiones de ciudadanía de Pompeyo fueron sancionadas por la “Lex Gellia –Cornelia”. Premió la lealtad de todas las tribus de Celtiberia que fueron recompensadas con repartos de tierras, que vieron ampliados notablemente sus territorios, contando con la protección política y militar de Roma, gracias al patrocinio de Pompeyo que lograba así aumentar considerablemente su clientela en la Península. Esta relación entre patrono y cliente obligaba al apoyo  político y militar de los indígenas a Pompeyo, quien a su vez, se comprometía a defender su causa en la propia metrópoli. 

Cuando en la primavera del año 71, marchaba a Roma , levantó un trofeo con su estatua en el paso pirenaico de Perthus, como símbolo del gran poder que dejaba en ella, tanto militar, contando con 7 legiones, como de prestigio personal, al disponer de una considerable clientela y partidarios entre la población indígena, como nos narran Salustio y Dion Casio. César, líder de los populares, fue quien tuvo que enfrentarse al enorme poder que había adquirido Pompeyo. 

Las ambiciones de César eran similares a las de Pompeyo.  No  perdió el tiempo y aprovechó su estancia en la Península primero como cuestor en el año 69 y después como gobernador de la provincia Ulterior en el año 61 a. C. Desplegó su actividad y su indudable habilidad política. Utilizó los mismos recursos que su rival en la Península para conseguir los medios necesarios tanto materiales como humanos. Atrajo a su causa a provinciales e indígenas, mediante relaciones de clientela, logradas tras solucionar conflictos internos, establecer medidas fiscales y repartos de tierra a los soldados licenciados. Incluso alcanzó el prestigio del triunfo, (aclamado “imperator” por su ejército), en el año 68 a. C., en una campaña militar, de pacificación en la zona de Lusitania situada entre los ríos  Tajo y Duero, en el extremo noroccidental de la provincia, ya en territorio galaico, tomando la ciudad de  Brigantium (A Coruña). 

Esta victoria supuso la sumisión definitiva de estos pueblos César supo aprovechar el momento difícil que atravesaba Pompeyo en abierto conflicto con el Senado. Ambos, junto con Craso, el hombre más rico de Roma, lograron un acuerdo, en la “Conferencia de Lucca”, en el año 56 a. C., para evitar que las tensiones entre ellos acabasen con este pacto, repartiéndose el dominio sobre las provincias del Imperio (Primer Triunvirato). 

Tres años más tarde, el Senado dictó una ley sobre las magistraturas que perjudicaba directamente a César y le dejaba fuera del juego político. La respuesta de César fue contundente. Fue la península ibérica el centro del conflicto donde cesarianos y pompeyanos tendrían que jugar la baza decisiva para alcanzar el poder. 

La concentración de una gran fuerza militar (7 legiones de Pompeyo y 6 de César) demuestran la magnitud de las operaciones. El  ejército de Pompeyo estaba bajo el mando de sus tres legados: Afranio, Petreyo y  Varrón. 

Pero  el genio militar de César consiguió que Hispania pasara a su esfera política con pocas operaciones militares (Campaña de Ilerda), y en un corto espacio de tiempo, entre el 49 al 47 a. C.  

Vencido Pompeyo, César procedió a la total pacificación con otro tipo de acciones convincentes, ya utilizadas: concesiones de ciudadanía, reducción de cargas fiscales y la devolución de las riquezas confiscadas al famoso templo de Hércules-Melqart en  Gades, donando a esta ciudad el título de  municipium. 

Dejó dos gobernadores: Q. Casio Longino en la Ulterior y M. Lépido en la Citerior. La mala gestión de este último predispuso sin duda a que afloraran de nuevo las tendencias pompeyanas.  

Ya  en el 48, Longino sufrió una dura rebelión sofocada por la oportuna intervención de Lépido. Fue destituido por C.  Trebonio, pero el estallido de la guerra volvía a aparecer, esta vez dirigidos por su hijo mayor Cneo y su hermano Sexto Pompeyo, que encontraron considerables apoyos en la Ulterior. 

Esta segunda parte de la guerra fue más dura y difícil por la envergadura de los ejércitos. Los familiares de Pompeyo lograron reunir 11 legiones, gran parte de ellas compuestas por hispanorromanos. 

Además, la rivalidad entre partidarios de uno y otro bando se extendía incluso dentro de las ciudades. De  nuevo se impuso el genio militar de César, que venció a los pompeyanos en la batalla de  Munda (cerca de Osuna) batalla que, aunque decisiva, no terminó con la resistencia de los pompeyanos.  

Todavía se tardaría un tiempo someter a las ciudades, donde hubo crueles represalias entre los partidarios del partido pompeyano en la Bética (Ulva, Astigi,  Corduba,  Hispalis,  Cart eia,  Gades,  Urso...). 

Cneo Pompeyo murió en los enfrentamientos. Sexto Pompeyo logró refugiarse entre los indígenas celtíberos clientes de su hermano y mantuvo su rebeldía durante un tiempo. La intervención del gobernador de la Citerior, Lépido intentó mantener el orden en Hispania. 

Sólo con la amnistía concedida por el Senado que le permitió volver a la vida política romana, acabó con la actividad de este último pompeyano. El  periodo comprendido entre el asesinato de César (44 a. C.) y la batalla de  Actium, que consolidó en principado de Augusto en el 31 a. C., Hispania estuvo sucesivamente bajo el control de los tres triunviros Lépido, Marco Antonio y Octavio. 

A diferencia del Primer  Triunvirato no se desarrolló en la Península ninguno de los grandes enfrentamientos entre ellos y durante este periodo, sólo los han llegado testimonios referentes a rebeliones y revueltas de lusitanos o acciones de bandidaje por Sierra Morena, sofocadas por Asinio Polión, Domicio Calvino o el propio Lépido. Aunque éstas no debieron tener demasiada importancia, proporcionaron que muchos de los gobernadores celebraran el triunfo en Roma. 

Con la llegada de Augusto al poder como primer emperador de Roma, tuvo lugar otro ciclo de guerras, con el que terminaría la dominación romana en Hispania.

Pilar Fernández Uriel 

lunes, 11 de enero de 2021

Villa romana de Can Terrers - La Garriga


La villa romana de Can Terrers, declarada Bien Cultural de Interés Nacional, es la plasmación del poder de la Roma de hace  2.000 años en la Garriga.

Se pueden visitar libremente las termas, pasear por las salas que hace dos milenios pisaban sus propietarios, y también conocer muchísimas cosas sobre uno de los asentamientos rurales romanos más importantes de Cataluña. 

¿Sabéis que el vino que se producía en can Terrers se bebía en Italia, Egipto y Grecia?

Visitas guiadas / Itinerarios

La villa cuenta con una estación de interpretación y forma parte del itinerario "De la Antigúedad a la Edad Media" que puedes hacer con nuestras GUIMO (guias móbiles). Una visita diferente, a tu aire y ritmo.

Vía sepulcral de la Plaza Villa de Madrid - Barcelona


La vía es una necrópolis romana de los siglos I a III​ situada en la plaza de la Villa de Madrid y sus alrededores, en Barcelona. El yacimiento queda a un nivel inferior al de la plaza, aunque la urbanización permite que se vea desde la calle. Es uno de los diversos espacios patrimoniales gestionados por el Museo de Historia de Barcelona.

Entre los siglos I y III, la ley romana prohibía los enterramientos dentro de la ciudad​ y por ello las áreas funerarias de Barcino se situaban fuera, a lo largo de los caminos que salían, empezando a tocar mismo de las murallas.​ En este contexto, la necrópolis de la plaza de la Villa de Madrid se considera una vía sepulcral secundaria,​ alejada de la muralla y con enterramientos de personas de clase media o baja​ (esclavos y libertos).​ Por el contrario, es la necrópolis barcelonesa de esta época encontrada en mejor estado de conservación y mejor estudiada, ya que del resto sólo se han localizado restos puntuales y, sobre todo, restos de los monumentos funerarios empleados en la ampliación de la muralla romana​ en el siglo IV.

El eje de la necrópolis es la vía, de unos cinco metros de anchura, de la que se han podido encontrar restos entre la calle Portaferrissa y la calle Santa Ana y que salía de la ciudad por la puerta sur-occidental (hacia la actual calle de la Boqueria)​ y se dirigía hacia las Corts o Sarrià. A ambos lados se encuentran las sepulturas en hileras pero sin una disposición regular, y con la necrópolis delimitada con un muro por el lado exterior.​ Se han identificado 85 sepulturas de diferentes tipos: seis cupae monolíticas, seis aras, una estela, dos losas con inscripción, treinta y tres túmulos (dos de ellos cónicos y el resto cuadrangulares o cupae de obra), diecisiete enterramientos protegidos con tejas y ánforas y veinte enterramientos sin restos de protecciones de ningún tipo.​ Actualmente, en la vía sepulcral se pueden ver tres cupae monolíticas más que las que había originalmente, ya que estas tres cupae procedentes de las excavaciones de la muralla se colocaron a finales de los años 50 en los emplazamientos donde se encontraban las restos muy dañadas de tres cupae de obra.

Poco después de dejar de utilizarse la necrópolis se fue cubriendo de depósitos aluviales procedentes de los torrentes que bajan de Collserola. Esto mantuvo escondidas las piedras y evitó que se reutilizaran como material de construcción. En 1956 se descubrió al hacer los movimientos de tierras para la construcción del edificio que actualmente ocupa el lado sureste de la plaza, y se hizo una primera campaña de excavación, seguida de otra en 1959.​ Entre el 2000 y el 2003 se volvió a excavar, coincidiendo con la última urbanización de la plaza.​ y en 2008 se inauguró la museización actual.

La excepcionalidad del yacimiento consiste en el hecho de que las tumbas se han encontrado en su contexto original, ya que de la gran mayoría de sepulturas romanas que conocemos sólo tenemos elementos de piedra reutilizados en otras obras​ o sepulturas aisladas. Como muestra, en Barcelona se han encontrado numerosos ejemplares de cupae monolíticas (28 en total), pero de éstas sólo se han encontrado en el lugar original las seis de esta vía sepulcral.

Wikipedia 

Vía Antequera Viñuela


Antequera-Viñuela: Se deduce de los datos aportados por Gozalbes, aunque él no la presente en sus mapas como una unidad. Documentada en el s. XVIII como vía romana, pasaría por el puente de Riogordo y el empedrado entre Viñuela y Romanes. 

En IG 1039 (año 1917) está señalada a su paso por Riogordo como "Camino de Antequera a Vélez", y en el paso de la hoja 1039 a la 1040 aparece como camino de Antequera a Viñuela.

viernes, 8 de enero de 2021

La Conquista Romana de la Península-Capítulo 5


La guerra sertoriana (82-72 a. C.) La figura misma de Sertorio ya es polémica. Para unos fue un traidor o, simplemente, un aventurero rebelde en busca de fortuna. Otros autores, sin embargo le retratan con tintes de caudillo y de héroe. Nuestras mejores fuentes son Livio Salustio y Plutarco. 

Los primeros años debieron ser duros y difíciles, como se desprende de sus viajes en busca de ayuda en el norte africano, (Mauritania y Tingis) y las Islas Afortunadas. En  el año 80 regresó a la Península, buscó ayuda en Lusitania pero pronto se instaló en la Hispania Citerior. No tardó en hacerse con el apoyo  indígena, controlando toda esta provincia, excepto algunas ciudades del Levante. 

La obra de Sertorio quedó plasmada en la estabilización de un centro en  Osca (Huesca), como capital, desde donde dispuso toda una organización administrativa y militar. Formó un Senado y unas magistraturas con exilados romanos y allí estableció una escuela donde se educaban conjuntamente a los hijos de las familias romanas e indígenas. Organizó un ejército al modo romano con elementos indígenas preparados. Sertorio utilizó tanto entre los lusitanos como en los celtíberos, lazos sagrados de vieja tradición indígena como la  fides y la  devotio, que exigía una fidelidad personal al caudillo hasta la muerte.

La cuestión sertoriana en la Península proporcionó una nueva dimensión tanto a las provincias como a la propia crisis romana. Por primera vez “los provinciales” no se consideraron ajenos sino que se encontraron inmersos y con una participación activa en los problemas de la metrópoli. Optaron y tomaron posición en uno y otro bando. El  asentamiento y los éxitos de Sertorio en Hispania decidieron a Sila enviar a la península ibérica en el año 79 a. C. a Q. Cecilio Metelo, como procónsul de la Ulterior. Pero  Sertorio se había hecho fuerte en Hispania. 

Fue el año 77 el momento más álgido de su poder. La conjunción de los ejércitos de Metelo y Pompeyo en el año 72 a. C. permitió acabar con la resistencia de Sertorio. Sin embargo no bastó la fuerza militar. Posiblemente la “Lex Plautia de redditu Lepidanorum”, del año 73, que daba la amnistía y permitía a los exilados recuperar su antigua posición, sería un factor definitivo para convencer a los antiguos aliados de Sertorio. Éste se suicidó y sus partidarios se rindieron a Pompeyo.  

El  sueño de Sertorio había acabado.

Pilar Fernández Uriel 

lunes, 4 de enero de 2021

Miliario de Juliano el Apóstata


Fué encontrado, con un pedazo de otro sin incripción, un miliario de Juliano el Apóstata (número 224). Estaba próximo a la carretera y por faltarle las últimas líneas, no señala el número de millas. 

Teniendo en cuenta que está en la vertiente del alto de Cerdeira y que ésta presenta en la cumbre vestigios de calzada, se le puede considerar in situ. 

Vías Romanas de Galicia