jueves, 2 de agosto de 2018

Vía republicana entre Auso y el Vallés

Descripción
Las comarcas del Vallés y de Osona han proporcionado unos testimonios excepcionales de una vía romano-republicana de finales del siglo ii a.C. 
El año 133 a.C. tuvo lugar la toma de la ciudad de Numancia y se inició en Hispania un proyecto de reestructuración a gran escala. En el marco de este proceso hemos de contemplar los testimonios de esta área geográfica.
En primer lugar, los tres miliarios de Manio Sergio  que señalan la ubicación de la primera milla (Santa Eulàlia de Riuprimer), la séptima (Tona) y la número 21 (Santa Eulàlia de Ronçana). Se trata de una vía probablemente militar, amojonada por el procónsul que ejerció sus funciones en la Hispania Citerior circa 120-110 a.C. Era un momento en el que Gneo Domicio Enobarbo hacía lo propio en la Narbonense, según nos atestigua el miliario de Treilles.
Estos tres miliarios guardan una buena equidistancia, de acuerdo con las millas que  constan en cada uno de ellos. El mayor problema lo presenta el de Santa Eulàlia de Riuprimer que, aunque no fue hallado en una excavación arqueológica, parece proceder de este término municipal y, por lo tanto, el caput viae debe buscarse en un radio de 1,5 km aproximadamente. La ciudad de Auso (Vich) queda demasiado lejos y el origen de la vía se iniciaría quizás en un campamento romano, hipótesis seguida por Arrayás, que se ha propuesto ubicar hipotéticamente en el Pla de la Rovira a partir del hallazgo de un muro de gran potencia; no obstante, no se dispone de más datos ni evidencias por el momento. Asimismo, queremos recordar –llegados a este punto– el topónimo de Riuprimer (rivo primario en la documentación medieval) que parece perpetuar la localización de esta primera milla.
Desde Santa Eulàlia de Riuprimer, la vía continuaría por el piedemonte del Serrat del Vilà –pasando entre el montículo de Malla– en dirección sud-este hacia el municipio de Tona, donde en la masía que lleva el significativo nombre de El Vilar, se halló el miliario de la séptima milla. En estas 6 millas se han localizado interesantes restos romano republicanos fechados también a finales del siglo ii a.C., entre los que destacan los bloques esculturados del monumento funerario de Malla, derivado de claros modelos itálicos, y el yacimiento del Camp de les Lloses, de fuerte impronta itálica también y fechado entre el 120 y el 80 a.C. 
A partir de Tona, el itinerario avanzaría en dirección S., circulando por el Pla de Querol (al E. de Collsuspina) hasta alcanzar la vertiente E. del Serrat de Santa Coloma; continuaría pasando por Santa Coloma Sasserra, Castellcir, Sant Quirze Safaja y Sant Feliu de Codines. Desde este último municipio, la vía descendería en sentido S. E. hasta el término de Santa Eulàlia de Ronçana, pasando en su recorrido por las proximidades del Castillo de Montbui y a los pies del Turó Gros (ubicación del oppidum ibérico del mismo nombre), hasta llegar a las inmediaciones de la masía de Can Vendrell donde fue encontrado –como ya ha sido mencionando- el tercer y último miliario asociado a este itinerario. El miliario de Santa Eulàlia de Ronçana señala la XXI milla distancia que concuerda con las 14 millas que lo separan de la VII de Tona. En este sector, justamente, la vía conectaría con el eje viario entre Aquae Calidae – Iluro.
Mapa

Fuentes de información
Marta Flórez, Isabel Rodà



No hay comentarios:

Publicar un comentario